Bubangos a buen recaudo
Bitácora con sabor a bubango y vuelo libre.... (Bubango: calabacín con estilo propio de las Islas Canarias...) Intento pecando de delictivo de salvar unos textos...
jueves
viernes
Nos adentramos apenas entre las voces y los bailes y el incesante barullo y parece que siempre termináramos por encontrarnos de una manera o de otra.
Mientras discutimos casi con dulzura parecemos una larga hoja en blanco, todas esas laderas blancas de un invierno que vive solo y crepita.
Nunca te había visto, si te digo la verdad, pero te conozco desde mucho tiempo antes. Y eso tú también lo sabes. Por eso a veces me sonríes como si nada, irónicamente, como si en ese instante de nuestras vidas cruzadas, tus manos hubieran sido las llaves y mis ojos la puerta.
Adentro, el fuego de una chimenea.
martes
Me reciben en un salón inmenso, de paredes cobrizas, y me entregan un dossier con todas y cada una de las razones para el desembarco. Todos me miran con una tacita de té en la mano.
La razón número ciento seis apela a la necesidad del paréntesis, a respirar pausado y sonreír hasta por la última hoja que arrastró el otoño.
Cada una de las razones me parecen nada. Llevo tus ojos clavados en la retina.
Llegada la hora, me tiro al agua de cabeza y tentando la orilla, me arranco de la piel los papeles, las horas al alba y esa sed recia que me dejó el pasado.
miércoles
lunes
Charlotte Brontë
(fragmento de Jane Eye, Traducción de Carmen Martín Gaite en Alba Editorial)
martes
Encogida por la proximidad de la gran ola
que me arrastra y rodea con sus enormes brazos de gigante
que me devuelve a la playa desdibujada,
desnuda y con el corazón fuera del cuerpo.
-quizá yacente dentro de un nido de tortugas
o aislado en la torre de un castillo de arena-
Cuándo volveré a brindarme serena
con licor de uva y bandejas de luz
en cada recodo de las calles que transito
en mi placentera búsqueda.
Solía encontrarme, a veces, y ser feliz mirando el cielo
tropezando con ojos negros
o escuchando solo para mis oídos esto.
Cuándo.
viernes
lunes
Dragonfly
Me resulta inquietante que me llamen refugio.
Yo no tengo puertas, no tengo llaves.
Soy la libélula en el umbral.
Dragonfly in the threshold.
Uneasy.
Always in the threshold.
martes
te sacarán los pies del barro?
...
Cause all I ever had
are redemption songs.
Bob Marley & The Wailers – Redemption Song
viernes
miércoles
jueves
martes
lunes
"- Estef, Estef! - gritaba desde detrás de la puerta- ¿Por qué no me contestas?!"
Mi boca se abrió para hablar del tiempo
(hay pronóstico de lluvia y bajas presiones)
pero fue la lengua la que quebró los labios
para posarse en mis dedos.
Sabor a ti.
Otro siglo permanecí en silencio.
martes
Huelga decir
viernes
En la hamaca sentí que me decías
no te escogí porque fueras santo
o con madera de futuro santo
santos he tenido demasiados
te escogí para variar.
Ernesto Cardenal (Granada, Nicaragua, 1925)
miércoles
Versos robados
Ha volado por el cuarto y se ha posado en un libro de poemas de Millares Sall y se han escurrido por las juntas de las estanterías unos versos: "Te digo que no vale meter el sueño azul bajo las sábanas...".
Se ha tomado un café y me ha pedido la hora a la manera británica.
Diez pasadas las dos, le dije.
A lo lejos, en el silencio de los cables del teléfono, recuenta las palabras que pudo robarse:
"sábanas azul te"
y las memorizó a la manera francesa.
Después huyó despavorido, desplumado por tanta belleza.
sábado
A lo lejos se acercan ya las barcas a puerto y los candiles en los recortados mástiles me recuerdan el traqueteo de tu oscilante mirada de niña. El acordeón y los instrumentos descansan lejos, en algún regazo de estudiante de conservatorio quizá.
Y las canciones que suenan aquí se pierden junto a mis pies descalzos en la orilla de la playa negra, que en días tan largos como tu nombre empapan sin reparos esta puerta y esta isla y esta voz.
viernes
lunes
Las luces de la ciudad se desploman
sobre arena invisile
sobre las tres lunas
que habitan entre tus rizos.
...
Rompe la noche
en cuanto te das la vuelta
y pides más hielo por favor.
Tus ojos apenas perciben
que yo estaba allí
esperándote
con toda una fábrica de cubitos para colmarte.
…
Pasado este insomnio
y con el hielo esparcido
por todo el parqué,
bailamos una melodía
absorta
en nuestros labios.
...
Los vecinos han llamado ya a la policía.
Y cuando me toman declaración,
afirmo haber visto la ciudad
rendida
justo debajo de tu pecho.
Me declaran culpable de todos los cargos:
Quebrantamiento del vacío
(de la aurora)
esparcimiento de estrellas
(por tu boca)
jueves
viernes
- Solamente tienes que cambiar la dirección- dijo el gato, y se lo comió.
(Franz Kafka. Praga, 1883- Austria 1924)
miércoles
La isla perdida
Rompe el mar. Rompe cíclico sobre rocas eternas que aparecen y desaparecen ante mis ojos ajados por el salitre y la espuma. Azul, verde, ocre de algas y moluscos, espero la llegada del barco que me llevará de vuelta a América, el continente, y a América, la soñada.
Dos nadadores emergen de las aguas con pulpos y palos.
Dos mujeres y una niña les esperan en los callaos.
Junto a la playa, barcas y aperos de pesca devorados por el óxido y el aliento del mar esperan un deshaucio que nunca llega.
El sol asoma a lo lejos mientras sube la marea.
Cierro los ojos apenas y ya diviso mi barco entre los olores que saturan mis sentidos.
Y siento el ahogo de la pérdida que se aproxima
y busco en la playa un recuerdo inerte que quepa en un bolsillo mientras ya rompe el mar en mi mente,
la espuma baña mi estómago
y baña mis venas de isla divisada,
de isla hundida en el pecho antes que cualquier amor,
antes de que una ola me empujara hacia mi primer soplo de vida.
...
Agrupación Sindical De Educación Y Descanso-Cuadro Canario – Tango Herreño
Calle Sur – Alma Llanera
lunes
Recogimos toda la uva que pudimos y la cargamos a la espalda todo el tiempo que fue necesario.
Bajamos desde las cumbres con el viento de cara.
La sal de la costa enfureció mi pelo y me concedió un aspecto de recogedora de moluscos y algas.
- Pareces una loca interesante - me susurraste.
...
¿Cómo puedo aún ruborizarme ante ti al brindar con ese vino?
Su buqué es terriblemente salado.
viernes
miércoles
Lecturas desde mi Isla
Rodeada de mar por todas partes,
soy isla asida al tallo de los vientos...
Nadie escucha mi voz si rezo o grito:
Puedo volar o hundirme...Puedo, a veces,
morder mi cola en signo de Infinito.
Soy tierra desgajándose...Hay momentos
en que el agua me ciega y acobarda,
en que el agua es la muerte donde floto...
Pero abierta a mareas y a ciclones,
hinco en el mar raíz de pecho roto.
Crezco del mar y muero de él...Me alzo
¡para volverme en nudos desatados...!
¡Me come un mar batido por las alas
de arcángeles sin cielo, naufragados!
Dulce María Loynaz (La Habana, 1902-1997)
lunes
Capas
Cada vez que pasaba un cierto tiempo perdía una capa en un acto de dolor extraño.
En uno de los múltiples espacios vividos dejé atrás una capa de colores de lana de llama, gruesa, tejida a mano y conformada apenas de algunos momentos de amor fugaz antes del adiós, y mucho antes del nuevo amanecer.
También me arranqué con fuerza una capa de hilo metálico que me arañaba la piel en las esquinas y que era yo en un espejo que colgaba de todos los techos, reflejada una y otra vez, como si no tuviera más remedio que ver siempre la misma imagen. Hubo sangre, pero también voló lejos.
Me desperté justo después de quitarme la capa de agua de catarata, que me recorría la espalda como una jauría de besos. Me olía a verde. A lluvia ordenada. A todas las voces que me acompañaron desde el principio, cuando aún andaba de rodillas. Me desperté porque una gota se enganchó a mí. Sin embargo, solo acaricié mis hombros con dulzura y seguí durmiendo.
El sol entra por la ventana y se posa ahora en mi piel.
Desnuda.
jueves
Pequeña muerte
Ha dejado de llover de repente. Toda la humedad abandona mi cuerpo y siento la sed apoderándose de mis juntas, de mis abotargados engranajes.
En la oscuridad que antecede a la tormenta ahuequé mis manos, corrí entre los charcos junto a las aceras palpitantes, lamenté no haber abierto más los labios.
(Como si se pudiera beber más fuerte.)
Después. Ha dejado de llover.
El cielo se abre y desaparezco.
Mi corazón bombea ahora despacio. En un silencio confortable para mi mente se presume a lo lejos una fiesta, luces, una melodía de Coltrane. Me veo allí, brindando con gintonic.
Mientras, aquí, la sed desplaza mi cuerpo y pervivo solo en el vacío.
Desvelada, y con mi piel ya cuarteada, improvisada de sol, me esfumo.
Y todo porque ha dejado de llover.
Y ha sido de repente.
Encontré esa joya en uno de mis viajes a bordo de "El "Destino", un galeón viejo y desvencijado. Las olas lo mecían a su gusto y yo me sentaba a mirar el movimiento de mi "Destino", mientras conversaba con el crujir de las piezas de madera de roble del barco.
No tenía compañía y sin embargo no sentía necesidad de gente a mi alrededor. "El Destino" era especial, y no había embarcación parecida a ella.
Cuando llegué a Puerto Esperanza sentí la terrible sensación del placer de atracar mi galeón durante un tiempo. Junto al muelle había una tasca llena de marineros, todos fuertes y solitarios. Entré allí, mis pasos eran como los de un elefante. Grandes y seguros. Me tomé un Bourbon, sin hielo. Sentí el fuego arañarme la garganta, lo hice despacio. Esos hombres de mar no iban a achantarme. Miré hacia el fondo, allí brillaba una luz, detrás de una cortina vi asomarse unas manos. Una sombra estaba esperándome.
Mi joya es un collar de flores.
Es un suspiro delicado
una orquídea hablando la lengua de las mariposas
el salvaje rugir de las olas cuando hay tormenta
el trueno que no suena
la lluvia en verano.
Es una cena a la luz de las velas,
el misterio de hacer lo inesperado,
ser sin saber quién ni por qué.
Es flotar sobre una nube sin alas
caminar en una barca sobre un volcán,
dar vueltas como la luz del faro en la noche.
Mi joya es un poco de miel en la punta de la lengua
la mirada tras un vaso.
Ella es,
la incógnita.
Mi Joya.
"El Destino" duerme en puerto mientras exploro esta nueva tierra. Esta ciudad desconocida y misteriosa. Lugar de ángeles y demonios. Marineros y pescadores.
Hoy duermo y descanso en Puerto Esperanza. Aquí cuidaré esto que he encontrado.
Por lo menos hasta mañana.
Más en Agua del Iregua
lunes
Más lazos
Nos encontraremos en las escalas de cada travesía. En cada puerto te recibiré con un collar hawaiano de flores de tantos colores que nos reiremos como niñas muy pequeñas. No disponemos de los horarios de este barco, no tiene importancia. Cuando llegas a puerto solo un abrazo y tierra firme bajo las huellas.
sábado
I've Got Life
Ain't got no home, ain't got no shoes
Ain't got no money, ain't got no class
Ain't got no skirts, ain't got no sweater
Ain't got no perfume, ain't got no beer
Ain't got no man
Ain't got no mother, ain't got no culture
Ain't got no friends, ain't got no schooling
Ain't got no love, ain't got no name
Ain't got no ticket, ain't got no token
Ain't got no God
What about God?
Why am I alive anyway?
Yeah, what about God?
Nobody can take away
I got my hair, I got my head
I got my brains, I got my ears
I got my eyes, I got my nose
I got my mouth, I got my smile
I got my tongue, I got my chin
I got my neck, I got my boobs
I got my heart, I got my soul
I got my back, I got my sex
I got my arms, I got my hands
I got my fingers, Got my legs
I got my feet, I got my toes
I got my liver, Got my blood
I've got life , I've got my freedom
I've got the life
And I'm gonna keep it
I've got the life
And nobody's gonna take it away
I've got the life